Junio 2017


TODO LO que me da la primavera y todo lo que me quita cuando se marcha. Sobre mediados de marzo empecé a sentir una necesidad física de salir a la calle y relacionarme de nuevo con los bípedos, pero antes de haber dado el primer paso llegó junio y de nuevo volví a sentir la misma necesidad física de quedarme en mi iglú, defender como sea mi soledad y no dejar que se acerquen que me toquen que me hablen que me miren.